El matrimonio y los días – Antonio Vázquez Galiano
El matrimonio es una vocación que requiere de un constante esfuerzo y una profunda comprensión de la persona amada. Sin embargo, muchas veces nos dejamos llevar por la rutina, el cansancio, los problemas o las expectativas frustradas, y olvidamos que el amor se construye día a día, con pequeños gestos, detalles y sacrificios. ¿Cómo podemos hacer de lo cotidiano una aventura y no un obstáculo para el romanticismo? ¿Cómo podemos mantener viva la ilusión y la pasión en nuestra relación conyugal? ¿Qué claves nos ofrece la fe cristiana para vivir el matrimonio como un camino de santidad?
Ficha técnica
- Autor: Antonio Vázquez Galiano
- Temática: Psicología diferencial, vida en pareja, consejos prácticos
Comentario del libro “El matrimonio y los días”
Una mirada positiva y realista al matrimonio
El autor de este libro, Antonio Vázquez Galiano, es un experto en el área de relaciones conyugales, que ha asesorado a numerosas parejas e instituciones educativas de Europa y América. Con una prosa ágil y amena, nos ofrece una serie de reflexiones y consejos para mejorar nuestra convivencia matrimonial, basados en su propia experiencia y en la doctrina de la Iglesia. El libro está dividido en cuatro partes, que abordan distintos aspectos de la vida conyugal: la comunicación, la intimidad, la educación de los hijos y la espiritualidad.
La comunicación, clave para el entendimiento
En la primera parte, el autor nos habla de la importancia de la comunicación en el matrimonio, tanto verbal como no verbal. Nos explica cómo evitar los malentendidos, las discusiones inútiles, las críticas destructivas y las actitudes negativas que pueden dañar nuestra relación. Nos propone, en cambio, cultivar el diálogo, la escucha, el respeto, el humor y la gratitud, como formas de expresar nuestro amor y aprecio al otro. También nos anima a compartir nuestros sentimientos, nuestros sueños, nuestros proyectos y nuestros problemas, buscando siempre el bien común y la ayuda mutua.
La intimidad, fuente de unión y fecundidad
En la segunda parte, el autor nos invita a redescubrir la belleza y el sentido de la intimidad conyugal, como un don de Dios y una expresión de nuestra entrega total al otro. Nos recuerda que el sexo no es solo un placer físico, sino una manifestación de nuestro amor esponsal, que nos une y nos hace partícipes de la creación divina. Nos aconseja, por tanto, cuidar nuestra intimidad, evitando la rutina, la frialdad, el egoísmo y la infidelidad, que pueden deteriorar nuestra relación. Nos sugiere, en cambio, fomentar la ternura, la pasión, la generosidad y la fidelidad, que pueden enriquecer nuestra relación. También nos habla de la importancia de la planificación familiar natural, como un método respetuoso con la naturaleza y la dignidad humana, que nos ayuda a vivir nuestra sexualidad de forma responsable y abierta a la vida.
La educación de los hijos, una tarea compartida
En la tercera parte, el autor nos orienta sobre cómo educar a nuestros hijos, desde el momento de su concepción hasta su madurez. Nos explica que los hijos son un regalo de Dios y una responsabilidad de los padres, que deben velar por su bienestar físico, emocional, intelectual y espiritual. Nos indica que los padres son los primeros y principales educadores de sus hijos, y que deben ejercer su autoridad con amor, firmeza y coherencia. Nos recomienda, además, que los padres colaboren entre sí y con la escuela, que sepan delegar y pedir ayuda cuando sea necesario, que respeten la personalidad y la libertad de sus hijos, y que les transmitan los valores cristianos y el sentido de la vida.
La espiritualidad, el alma del matrimonio
En la cuarta y última parte, el autor nos muestra cómo vivir el matrimonio como un camino de santidad, siguiendo el ejemplo de Cristo y de la Virgen María. Nos enseña que el matrimonio es un sacramento, una alianza de amor entre un hombre y una mujer, que refleja el amor de Dios por la humanidad. Nos invita, por tanto, a vivir nuestro matrimonio con fe, esperanza y caridad, como una vocación y una misión. Nos propone, asimismo, que cultivemos nuestra vida espiritual, mediante la oración, la lectura de la Palabra de Dios, la participación en los sacramentos, la pertenencia a la Iglesia y el servicio a los demás.
Conclusión
El matrimonio y los días es un libro que nos ofrece una visión positiva y realista del matrimonio, desde una perspectiva cristiana y humana. Es un libro que nos ayuda a valorar y a mejorar nuestra relación conyugal, a través de consejos prácticos y ejemplos concretos. Es un libro que nos anima a vivir nuestro matrimonio como una aventura y una oportunidad de crecimiento personal y espiritual. Es un libro que nos recuerda que el matrimonio es un don de Dios y una llamada a la santidad.