Jesús, Rey de amor – M. Crawley-Boevey

El libro “Jesús, Rey de amor” es una obra clásica de la espiritualidad cristiana, escrita por el padre Mateo Crawley-Boevey, un apóstol incansable del Sagrado Corazón de Jesús. En este libro, el autor nos invita a conocer y amar al Corazón de Jesús, que es el centro de la revelación divina y el modelo de la santidad humana. El libro está lleno de reflexiones profundas, consejos prácticos y testimonios personales que nos ayudan a vivir una relación íntima y transformadora con Jesús, Rey de amor.

Ficha técnica

  • Autor: Mateo Crawley-Boevey
  • Temática: Devoción al Sagrado Corazón de Jesús

Comentario del libro “Jesús, Rey de amor”

El libro se divide en cuatro partes, que corresponden a los cuatro fines de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús: conocerlo, amarlo, repararlo e imitarlo.

Conocer al Corazón de Jesús

En la primera parte, el autor nos presenta al Corazón de Jesús como el símbolo de su amor infinito por nosotros, que se manifiesta en toda su vida, desde la Encarnación hasta la Cruz. Nos explica el significado de las revelaciones que Jesús hizo a santa Margarita María de Alacoque, en las que le mostró su Corazón herido por el pecado y la ingratitud de los hombres, y le pidió que le consagrara su vida y que difundiera su devoción. También nos habla de la importancia de la Eucaristía, el sacramento del amor, en el que Jesús nos entrega su Cuerpo y su Sangre, su Alma y su Divinidad, y nos invita a adorarlo y a recibirlo con frecuencia y fervor.

Amar al Corazón de Jesús

En la segunda parte, el autor nos enseña cómo amar al Corazón de Jesús, respondiendo a su amor con nuestro amor. Nos propone varios medios para avivar nuestro amor, como la oración, la meditación, la lectura espiritual, la confianza, la entrega, la obediencia, la renuncia, el sacrificio, la reparación y la consagración. Nos anima a practicar la Hora Santa, una forma de oración que consiste en pasar una hora en compañía de Jesús, especialmente durante la noche, recordando su agonía en el huerto de Getsemaní. También nos recomienda la entronización del Sagrado Corazón de Jesús en los hogares, una ceremonia que consiste en colocar una imagen del Corazón de Jesús en un lugar de honor en la casa, y en consagrar a él a toda la familia, para que reine en ella con su amor, su paz y su bendición.

Reparar al Corazón de Jesús

En la tercera parte, el autor nos muestra cómo reparar al Corazón de Jesús, ofreciéndole nuestro amor y nuestras obras en desagravio por las ofensas que recibe de los pecadores. Nos explica el sentido de la reparación, que es una forma de participar en la obra redentora de Cristo, y nos da algunos ejemplos de cómo reparar, como la comunión reparadora, el apostolado, la penitencia, la indulgencia y la misericordia. Nos exhorta a tener un espíritu de reparación, que nos lleve a ofrecer todo lo que somos y hacemos por amor al Corazón de Jesús, y a unirnos a su pasión y a su cruz, que son el precio de nuestra salvación.

Imitar al Corazón de Jesús

En la cuarta y última parte, el autor nos indica cómo imitar al Corazón de Jesús, siguiendo sus virtudes y sus ejemplos. Nos presenta al Corazón de Jesús como el modelo perfecto de la santidad, que resume toda la ley y los profetas en el mandamiento del amor a Dios y al prójimo. Nos describe las principales virtudes del Corazón de Jesús, como la humildad, la mansedumbre, la paciencia, la pureza, la justicia, la caridad, la obediencia, la pobreza y la abnegación. Nos invita a conformar nuestro corazón al suyo, pidiéndole que nos conceda su gracia y su espíritu, y que nos transforme en él.

Conclusión

El libro “Jesús, Rey de amor” es una joya de la literatura espiritual, que nos ofrece una visión integral y profunda de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús, que es el camino más seguro y más corto para llegar a Dios. El autor, Mateo Crawley-Boevey, nos transmite con su estilo sencillo y conmovedor su experiencia personal de amor al Corazón de Jesús, y nos contagia su entusiasmo y su celo por hacerlo reinar en todos los corazones. Es un libro que nos inspira, nos ilumina y nos fortalece en nuestra vida cristiana, y que nos ayuda a crecer en la amistad con Jesús, Rey de amor.

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