El hecho extraordinario – Manuel García Morente
¿Qué puede llevar a un filósofo agnóstico y prestigioso a convertirse al catolicismo y ordenarse sacerdote? Esa es la pregunta que se plantea el lector al acercarse a “El hecho extraordinario”, una carta que Manuel García Morente escribió en 1940 a su amigo el padre José María García Lahiguera, y que se publicó póstumamente en 1951. En ella, el autor narra con sinceridad y emoción el acontecimiento que cambió su vida: una experiencia mística que tuvo en París en 1937, durante su exilio por la Guerra Civil española.
Ficha técnica
- Autor: Manuel García Morente
- Temática: Autobiografía: religiosa y espiritual
Comentario del libro “El hecho extraordinario”
El contexto histórico y personal
La carta de García Morente se sitúa en un momento dramático de la historia de España y de Europa. El autor había sido catedrático de Ética en la Universidad de Madrid, discípulo de Bergson y de la escuela neokantiana de Marburgo, y colaborador de Ortega y Gasset en la Revista de Occidente. Su pensamiento se caracterizaba por el rigor, la claridad y la apertura a las corrientes filosóficas más innovadoras. Sin embargo, la Guerra Civil le obligó a abandonar su país y su cátedra, y a refugiarse en Francia, donde sufrió la pobreza, la soledad y la angustia. Además, su yerno fue asesinado por los milicianos republicanos, y su hija quedó viuda con dos hijos pequeños.
El hecho extraordinario
En medio de esta situación desesperada, García Morente tuvo una experiencia que él mismo califica de «hecho extraordinario». Fue una noche de diciembre de 1937, cuando escuchó por la radio una obra de Berlioz, L’enfance du Christ. De repente, sintió una presencia divina que le llenó de paz y de amor, y que le hizo comprender el sentido de la Encarnación, de la Cruz y de la Resurrección. Fue una gracia inesperada y gratuita, que le hizo recuperar la fe de su infancia y le impulsó a buscar la verdad con humildad y obediencia. Así lo explica él mismo: «Me sentí invadido por una luz, por una claridad, por una evidencia que no eran de este mundo. […] Era Dios, el Dios vivo y verdadero, el que me hablaba al corazón y a la inteligencia».
La conversión y el sacerdocio
La experiencia mística de García Morente no fue un episodio aislado, sino el inicio de un proceso de conversión que duró tres años. Durante ese tiempo, el autor se dedicó a estudiar la Biblia, los Padres de la Iglesia, los místicos y los teólogos, especialmente Santo Tomás de Aquino. También buscó el consejo y la dirección espiritual de varios sacerdotes, entre ellos el padre García Lahiguera, a quien dirigió la carta. Finalmente, en 1940, recibió el bautismo, la confirmación y la primera comunión en la capilla de los dominicos de París. Poco después, sintió el llamado al sacerdocio, y se trasladó a Argentina, donde fue ordenado en 1941. Allí ejerció su ministerio hasta su muerte, en 1942, a los 56 años.
Conclusión
“El hecho extraordinario” es un testimonio conmovedor y profundo de la misericordia de Dios y de la libertad del hombre. García Morente nos muestra cómo la gracia puede transformar una vida, incluso en las circunstancias más adversas. Su relato es una invitación a abrirnos a la acción de Dios en nuestra historia personal, y a seguir su voluntad con confianza y alegría. Es, en definitiva, una obra maestra de la literatura espiritual, que merece ser leída y meditada por todo creyente.