La ética de la redistribución – Bertrand de Jouvenel
El libro “La ética de la redistribución” de Bertrand de Jouvenel es una obra clásica de la filosofía política, que cuestiona los fundamentos y las consecuencias de las políticas de igualdad económica. Escrito en 1951, el libro se basa en dos conferencias que el autor impartió en la Universidad de Cambridge, en las que analiza críticamente el ideal socialista de la redistribución de la riqueza y el papel del Estado en la economía. El autor, que fue un destacado pensador liberal y conservador, ofrece una visión original y profunda de la ética pública, desde una perspectiva cristiana y humanista.
- Jouvenel, Bertrand de (Author)
Ficha técnica
- Autor: Bertrand de Jouvenel
- Temática: Filosofía política, ética, economía
Comentario del libro “La ética de la redistribución”
El ideal socialista
En la primera conferencia, el autor expone el origen y la evolución del ideal socialista de la redistribución, que consiste en eliminar las desigualdades económicas entre los individuos, mediante la intervención del Estado. El autor señala que este ideal surge como una reacción al escándalo de la pobreza y al lujo indecente, que se observan en las sociedades capitalistas. Sin embargo, el autor cuestiona la validez de este ideal, tanto desde el punto de vista ético como desde el punto de vista práctico.
El autor sostiene que el ideal socialista se basa en una concepción errónea de la justicia, que confunde la igualdad con la fraternidad. Según el autor, la justicia no consiste en dar a todos lo mismo, sino en dar a cada uno lo que le corresponde, según sus méritos y sus necesidades. La fraternidad, en cambio, es una virtud que implica el amor al prójimo y la generosidad voluntaria, no la imposición forzosa de la igualdad. El autor afirma que el ideal socialista, al pretender sustituir la fraternidad por la igualdad, destruye la libertad y la responsabilidad de los individuos, y los reduce a meros objetos de la acción estatal.
El autor también argumenta que el ideal socialista es irrealizable, porque ignora las leyes de la economía y de la naturaleza humana. Según el autor, la redistribución de la riqueza no solo es ineficaz para aliviar la pobreza, sino que además genera efectos negativos, como la disminución de la producción, el despilfarro de los recursos, la corrupción de los gobernantes y la desmoralización de los gobernados. El autor sostiene que la redistribución de la riqueza no puede lograr la igualdad, porque las diferencias entre los individuos son inevitables y legítimas, y porque la riqueza no es un bien estático y limitado, sino un bien dinámico y creciente, que depende del trabajo, del ahorro y de la innovación.
El gasto estatal
En la segunda conferencia, el autor examina el fenómeno del gasto estatal, que es el medio principal por el que el Estado realiza la redistribución de la riqueza. El autor describe las distintas formas y fines del gasto estatal, y las distingue según su naturaleza y su impacto en la economía y en la sociedad. El autor distingue entre el gasto funcional, que es el que se destina a proveer servicios públicos esenciales, como la defensa, la justicia y la educación, y el gasto de consumo, que es el que se destina a satisfacer las necesidades o los deseos de determinados grupos o individuos, como las pensiones, las subvenciones o las obras públicas.
El autor critica el gasto de consumo, que considera como una forma de redistribución injusta e ineficiente. Según el autor, el gasto de consumo implica una transferencia de recursos de los contribuyentes a los beneficiarios, que no se basa en ningún criterio de justicia, sino en el poder político y en la presión social. El autor afirma que el gasto de consumo no solo es injusto, sino que además es ineficiente, porque distorsiona los incentivos y las preferencias de los agentes económicos, y porque genera un déficit público que amenaza la estabilidad financiera y monetaria.
El autor propone una limitación del gasto estatal, que respete la libertad y la responsabilidad de los individuos y de las asociaciones intermedias. Según el autor, el Estado debe limitarse a ejercer sus funciones esenciales, y dejar a la iniciativa privada el desarrollo de las actividades económicas y sociales. El autor defiende el principio de subsidiariedad, que establece que el Estado solo debe intervenir cuando los niveles inferiores de la sociedad no puedan resolver los problemas por sí mismos. El autor aboga por una reforma fiscal, que reduzca la presión tributaria y que fomente el ahorro y la inversión. El autor también apoya una reforma política, que fortalezca el control democrático y la transparencia del gasto estatal.
Conclusión
El libro “La ética de la redistribución” de Bertrand de Jouvenel es una obra de gran valor y actualidad, que ofrece una reflexión profunda y original sobre el problema de la justicia social y el papel del Estado en la economía. El autor, desde una perspectiva cristiana y humanista, cuestiona el ideal socialista de la igualdad económica, y propone una visión liberal y conservadora, que defiende la libertad, la responsabilidad y la fraternidad de los individuos y de las asociaciones intermedias. El autor, con una gran erudición y una clara exposición, analiza los fundamentos éticos y las consecuencias prácticas de las políticas de redistribución de la riqueza, y ofrece una serie de principios y propuestas para una reforma económica y política, que respete la dignidad y el bien común de las personas.