La interioridad de la Persona Humana – John F. Crosby

¿Qué significa ser persona? ¿Qué nos distingue de los demás seres? ¿Qué nos hace únicos e irrepetibles? Estas son algunas de las preguntas que se plantea la antropología filosófica, una disciplina que busca comprender la naturaleza y la dignidad del ser humano. En este sentido, el libro “La interioridad de la Persona Humana” de John F. Crosby es una obra fundamental y original que aporta una nueva luz sobre el misterio de la persona desde la perspectiva del personalismo cristiano.

Ficha técnica

  • Autor: John F. Crosby
  • Temática: Antropología filosófica, personalismo cristiano

Comentario del libro “La interioridad de la Persona Humana”

La interioridad como rasgo distintivo de la persona

John F. Crosby nos introduce en el concepto de interioridad como el núcleo esencial de la persona, aquello que la hace incomunicable e irrepetible. La interioridad es la capacidad de tener una vida propia, de ser consciente de sí mismo, de tener una intimidad inaccesible a los demás, de tener una libertad y una responsabilidad que le permiten actuar según su conciencia. La interioridad es lo que nos hace sujetos y no objetos, fines y no medios, personas y no cosas.

La transcendencia de la persona

Pero la interioridad no es un aislamiento, sino una apertura a la realidad, a los demás y a Dios. La persona es transcendente, es decir, supera los límites de su naturaleza y de su situación, y busca un sentido y un valor más allá de lo inmediato y lo material. La transcendencia se manifiesta especialmente en la dimensión moral de la persona, en su capacidad de conocer y seguir la ley natural inscrita en su corazón, que le orienta hacia el bien y le aleja del mal. La transcendencia también se expresa en la dimensión religiosa de la persona, en su deseo de entrar en comunión con Dios, que es la fuente y el fin de su existencia.

La imagen de Dios en la persona

Finalmente, John F. Crosby nos muestra cómo la persona humana es imagen de Dios, no sólo por su naturaleza racional y espiritual, sino también por su interioridad y su transcendencia. La persona humana refleja el misterio de Dios, que es un ser personal, que tiene una vida íntima y una libertad infinita, que se comunica y se entrega a los demás, que nos llama y nos ama. La persona humana es, por tanto, un don de Dios y una tarea para sí misma, llamada a desarrollar su interioridad y su transcendencia, a cultivar su dignidad y su vocación, a responder al amor de Dios y a colaborar con su plan.

Conclusión

El libro “La interioridad de la Persona Humana” de John F. Crosby es una obra maestra de la antropología filosófica, que nos ofrece una visión profunda y luminosa de la persona humana desde el personalismo cristiano. Se trata de un libro claro, ordenado y comprensible, que bebe de las fuentes de la tradición filosófica occidental, pero también de la filosofía personalista más reciente, especialmente de Kierkegaard, Newman, Scheler, Edith Stein, von Hildebrand y Wojtyla. Es un libro que nos invita a reflexionar sobre nuestra propia identidad y nuestro destino, sobre nuestra relación con los demás y con Dios, sobre nuestra misión y nuestro sentido en el mundo. Es un libro que nos ayuda a descubrir el valor y la belleza de la persona humana, creada por Dios y llamada a la plenitud.

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