Poética del monasterio – Armando Pego
La crisis de la tradición occidental, que afecta a las figuras del padre, el maestro y el monje, es el punto de partida de este ensayo de Armando Pego, que propone una poética del monasterio como alternativa para la transmisión de la vida y la creación. El autor, doctor en Filosofía y profesor de la Universidad de Navarra, nos invita a recorrer los espacios del hogar, la escuela y la celda, donde se desarrolla una pedagogía humanista basada en los mitos clásicos de nuestra cultura.
Ficha técnica
- Autor: Armando Pego Puigbó
- Temática: Filosofía, cultura, espiritualidad
Comentario del libro “Poética del monasterio”
El monasterio como metáfora
El monasterio no es solo una realidad histórica o una forma de vida religiosa, sino también una metáfora que expresa la vocación del hombre a la búsqueda de la verdad, la belleza y el bien. El monasterio es un lugar de tránsito entre el mundo y la eternidad, donde se cultiva la oración, el estudio, el trabajo y la comunidad. El monasterio es un modelo de civilización que se opone al nihilismo y al relativismo de la modernidad.
El hogar como espacio de acogida
El hogar es el primer espacio donde se forma la persona, donde se aprende a amar y a ser amado. El hogar es el lugar donde se transmite la fe y la cultura, donde se celebra la vida y se afronta la muerte. El hogar es el ámbito donde se ejerce la paternidad y la maternidad, donde se asume la responsabilidad y la libertad. El hogar es el refugio donde se encuentra la paz y la alegría.
La escuela como espacio de aprendizaje
La escuela es el segundo espacio donde se educa la persona, donde se adquiere el conocimiento y la sabiduría. La escuela es el lugar donde se enseña y se aprende, donde se dialoga y se argumenta, donde se cuestiona y se responde. La escuela es el medio donde se ejerce la autoridad y la obediencia, donde se desarrolla la inteligencia y la memoria. La escuela es el taller donde se crea y se innova.
La celda como espacio de intimidad
La celda es el tercer espacio donde se perfecciona la persona, donde se cultiva la interioridad y la espiritualidad. La celda es el lugar donde se ora y se medita, donde se lee y se escribe, donde se silencia y se escucha. La celda es el ámbito donde se ejerce la soledad y la comunión, donde se profundiza en la conciencia y la voluntad. La celda es el santuario donde se encuentra con Dios y con uno mismo.
Conclusión
“Poética del monasterio” es un libro que nos ofrece una visión original y profunda de la tradición occidental, desde una perspectiva cristiana y humanista. El autor nos muestra cómo el monasterio, el hogar, la escuela y la celda son espacios que nos ayudan a crecer como personas y como ciudadanos, a integrar la fe y la razón, a valorar el pasado y el presente, a vivir con sentido y esperanza. Es un libro que nos invita a habitar el monasterio que llevamos dentro, a descubrir el tesoro que se esconde en nuestra alma.