Refutación de las filosofías – Francis Bacon
Francis Bacon es uno de los padres del empirismo filosófico y científico, y un pionero del pensamiento moderno. Su obra “Refutación de las filosofías” es un breve pero contundente ataque a las escuelas filosóficas anteriores, a las que acusa de ser dogmáticas, especulativas y erróneas. Bacon propone una nueva forma de hacer filosofía, basada en la observación, la experiencia y el método inductivo, que busca descubrir las verdades de la naturaleza y de Dios.
Ficha técnica
- Autor: Francis Bacon
- Temática: Filosofía, empirismo, ciencia
Comentario del libro “Refutación de las filosofías”
El contexto histórico y biográfico de Bacon
Francis Bacon nació en Londres en 1561, en el seno de una familia influyente y culta. Estudió en Cambridge y en Francia, y se dedicó a la política y al derecho, llegando a ser canciller de Inglaterra. Sin embargo, su carrera se vio truncada por acusaciones de corrupción, que lo llevaron a la cárcel y al destierro. Aprovechó su retiro forzoso para dedicarse a sus trabajos filosóficos y científicos, que publicó en varias obras, entre las que destaca el “Novum Organum” (1620), donde expone su método experimental. Murió en 1626, a causa de una neumonía que contrajo al experimentar con la conservación del frío.
El contenido y la estructura de la obra
La obra “Refutación de las filosofías” forma parte del “De dignitate et augmentis scientiarum” (Sobre la dignidad y el progreso de las ciencias), una ampliación y revisión de su anterior “Advancement of Learning” (El avance del saber). En este libro, Bacon hace una clasificación de las ciencias y una crítica de las filosofías existentes, que divide en tres grupos: las filosofías sofísticas, las empíricas y las superiores. Las filosofías sofísticas son las que se basan en la retórica, la dialéctica y la lógica, y que pretenden demostrar todo a partir de principios generales y abstractos. Bacon las llama “ídolos del teatro”, porque son meras representaciones ficticias de la realidad. Entre ellas, incluye a la filosofía escolástica, la aristotélica, la platónica, la pitagórica y la cabalística. Las filosofías empíricas son las que se apoyan en la observación y la experiencia, pero que no llegan a establecer leyes universales y necesarias. Bacon las llama “hormigas”, porque se limitan a recoger y acumular datos sin orden ni criterio. Entre ellas, incluye a la filosofía natural, la alquimia, la magia y la astrología. Las filosofías superiores son las que combinan la razón y la revelación, y que buscan conocer la verdad de Dios y de la naturaleza. Bacon las llama “abejas”, porque extraen el jugo de las flores y lo transforman en miel. Entre ellas, incluye a la filosofía cristiana, la hermética y la paracélsica.
Bacon rechaza las filosofías sofísticas por ser falsas, las empíricas por ser incompletas, y las superiores por ser confusas. Propone, en cambio, una nueva filosofía, que llama “filosofía de la restauración”, que consiste en purificar el entendimiento de los prejuicios y las ilusiones, y en aplicar un método inductivo que parta de los hechos particulares y sensibles, y que ascienda, por medio de la comparación, la exclusión y la experimentación, a las causas, las formas y las leyes de la naturaleza. Así, se podrá alcanzar un conocimiento cierto y útil, que glorifique a Dios y beneficie al hombre.
La valoración y la relevancia de la obra
La obra de Bacon es una obra de gran valor y relevancia, tanto desde el punto de vista filosófico como desde el punto de vista científico. Desde el punto de vista filosófico, Bacon representa una ruptura con la tradición medieval y renacentista, y una apertura a la modernidad. Su crítica a las filosofías anteriores es una invitación a liberarse de la autoridad, la costumbre y la opinión, y a buscar la verdad por uno mismo, con espíritu crítico y creativo. Su propuesta de una nueva filosofía es una muestra de su visión amplia y profunda de la realidad, que abarca tanto el orden natural como el sobrenatural, y que respeta tanto la razón como la fe. Su concepción del conocimiento como un medio para el dominio y el mejoramiento de la naturaleza y de la vida humana es una expresión de su optimismo y su humanismo.
Desde el punto de vista científico, Bacon es uno de los fundadores de la ciencia moderna, y uno de los precursores del método científico. Su énfasis en la observación, la experiencia y la experimentación es una contribución decisiva al desarrollo de la ciencia empírica y experimental, que se basa en los hechos y en la evidencia, y que busca leyes generales y necesarias. Su idea de la inducción como un proceso de eliminación de las hipótesis falsas y de confirmación de las verdaderas es una anticipación de la lógica y la epistemología modernas, que se ocupan de los criterios de la verdad y de la validez del conocimiento. Su proyecto de una reforma y un progreso de las ciencias es una inspiración para las generaciones posteriores de científicos, que han seguido su ejemplo y su consejo.
Conclusión
En conclusión, el libro “Refutación de las filosofías” de Francis Bacon es una obra maestra de la filosofía y de la ciencia, que merece ser leída y estudiada por todos los que quieran conocer la verdad y mejorar el mundo.